Soy médico especialista en Traumatología y Cirugía Ortopédica, con experiencia en el tratamiento de lesiones articulares, especialmente las que afectan a la rodilla. A lo largo de mi carrera he realizado y acompañado a cientos de pacientes en su proceso de recuperación tras una artroscopia de rodilla, ayudándoles a retomar su movilidad, su deporte o su vida cotidiana con confianza. En este artículo te explicaré de forma clara y profesional qué es una artroscopia de rodilla, cuándo se indica, cómo se realiza y qué puedes esperar antes y después del procedimiento.
Si has sido diagnosticado con una rotura de menisco o tu traumatólogo te ha recomendado una artroscopia de rodilla, probablemente tengas muchas preguntas y cierta inquietud sobre lo que viene. Aquí encontrarás respuestas basadas en evidencia médica y experiencia clínica, con un enfoque humano, sencillo y cercano.
¿Qué es la Artroscopia?
La artroscopia de rodilla es una técnica quirúrgica mínimamente invasiva que permite al especialista observar y tratar directamente el interior de la articulación mediante una pequeña cámara llamada artroscopio. Este instrumento, del grosor de un lápiz, se introduce a través de incisiones de unos pocos milímetros. A diferencia de las cirugías abiertas tradicionales, la artroscopia permite una recuperación más rápida, menor dolor postoperatorio y cicatrices prácticamente imperceptibles.
Desde el punto de vista médico, la artroscopia de rodilla procedimiento está clasificada bajo el código artroscopia de rodilla CIE 10, que corresponde al sistema internacional de codificación utilizado en hospitales para registrar diagnósticos y tratamientos quirúrgicos. Este procedimiento no solo se usa para reparar lesiones de menisco, sino también para tratar daños en ligamentos, eliminar fragmentos de cartílago y diagnosticar patologías internas de la rodilla.

Artroscopia de Menisco, ¿en qué consiste?
La artroscopia de menisco es una intervención que se realiza cuando el menisco —una estructura cartilaginosa en forma de semiluna que actúa como amortiguador entre el fémur y la tibia— sufre una rotura. A través de la cámara, el cirujano evalúa el tipo y extensión de la lesión y, según el caso, procede a reparar el menisco o extirpar la parte dañada.
Durante la artroscopia de rodilla procedimiento, se utilizan microinstrumentos que permiten realizar cortes precisos y manipular tejidos sin dañar las estructuras circundantes. En muchos casos, la reparación del menisco es posible mediante suturas internas, especialmente en pacientes jóvenes o deportistas, donde se busca conservar la función completa del cartílago.
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Tipos de rotura de Menisco
Existen varios tipos de rotura de menisco y cada una determina el tipo de tratamiento y recuperación. Entre las más comunes encontramos:
| Tipo de rotura | Descripción | Tratamiento habitual |
| Radial | Corta transversalmente el menisco, afectando la estabilidad articular. | Suele requerir resección parcial. |
| Longitudinal | Paralela al borde del menisco; puede convertirse en “asa de cubo”. | Ideal para sutura meniscal. |
| Horizontal | Divide el menisco en capas superior e inferior. | Generalmente secciona y se extrae la parte afectada. |
| Compleja | Combinación de varios tipos. | Se valora caso por caso. |
La identificación del tipo de rotura se realiza mediante una resonancia magnética, aunque la confirmación final se da durante la artroscopia de rodilla.
Duración de la Operación de Menisco
Una artroscopia de rodilla tiene una duración promedio de entre 30 y 60 minutos, dependiendo del tipo de rotura y del procedimiento realizado. En casos simples, como una resección parcial del menisco, la intervención puede durar menos de media hora. En cambio, si se requiere una sutura compleja o reparación simultánea de ligamentos, el tiempo puede extenderse.
El paciente suele permanecer en el quirófano bajo anestesia regional o general, y tras la cirugía pasa unas horas en recuperación antes de poder regresar a casa el mismo día o al día siguiente. Esta rapidez y efectividad hacen de la artroscopia uno de los procedimientos más utilizados en traumatología moderna.

Postoperatorio Operación de Menisco
El postoperatorio de la operación de menisco es generalmente bien tolerado. En las primeras 24 a 48 horas se recomienda reposo, aplicación de frío local y mantener la pierna elevada. El dolor suele ser leve y controlable con analgésicos comunes.
A los pocos días, se inicia la fisioterapia, que incluye ejercicios de movilidad progresiva y fortalecimiento muscular. Este proceso es clave para recuperar la función completa de la rodilla. En pacientes que se someten a artroscopia de rodilla procedimiento con reparación meniscal, el apoyo con muletas puede ser necesario durante las primeras semanas.
Tiempo de recuperación tras operación de menisco
El tiempo de recuperación tras la operación de menisco depende del tipo de procedimiento. En promedio:
- Meniscectomía parcial: de 2 a 4 semanas para actividades cotidianas.
- Sutura meniscal: de 6 a 12 semanas, con reincorporación gradual al deporte.
Una buena rehabilitación y el seguimiento médico adecuado son determinantes para lograr un resultado exitoso. Es importante respetar los tiempos de cicatrización del menisco y evitar sobrecargas tempranas, especialmente en los primeros meses.

🧾 Preguntas Frecuentes sobre la Artroscopia de Rodilla
¿Qué es una artroscopia de rodilla y para qué sirve?
Es una cirugía mínimamente invasiva que permite diagnosticar y tratar lesiones dentro de la rodilla, como la rotura de menisco o lesiones de ligamentos.
¿Cuánto tiempo dura una artroscopia de rodilla procedimiento?
Generalmente entre 30 y 60 minutos, dependiendo del tipo de lesión tratada.
¿Qué cuidados debo tener después de la operación de menisco?
Reposo, aplicación de frío local, fisioterapia y control médico para evaluar la evolución.
¿Qué es la artroscopia de rodilla CIE 10?
Es la codificación médica internacional utilizada para registrar el procedimiento quirúrgico en los sistemas hospitalarios.
¿Puedo volver a hacer deporte tras una artroscopia de rodilla?
Sí, la mayoría de los pacientes retoma su actividad física una vez completada la rehabilitación, bajo supervisión médica.