He dedicado gran parte de mi carrera como especialista en traumatología, he ayudado a cientos de pacientes a recuperar su movilidad mediante la implantación de prótesis de rodilla. Gracias a mi experiencia en hospitales de alto nivel y a la actualización constante en técnicas quirúrgicas, puedo orientar a cada persona para elegir el tipo y material de prótesis más adecuado según su patología, estilo de vida y expectativas.
En este artículo te explicaré de forma clara qué es una prótesis de rodilla, los tipos que existen, los materiales más usados, cómo se fijan y cómo decidir cuál es la ideal para ti.
Qué es una prótesis de rodilla
Una prótesis de rodilla es un implante médico diseñado para reemplazar las superficies dañadas de la articulación de la rodilla, generalmente a causa de artrosis avanzada, lesiones traumáticas o deformidades. Está compuesta por diferentes piezas que se adaptan al fémur, la tibia y, en algunos casos, a la rótula. Su objetivo principal es restaurar la función articular, reducir el dolor y mejorar la calidad de vida, permitiendo que el paciente retome actividades cotidianas con mayor facilidad.
El procedimiento quirúrgico para colocar una prótesis de rodilla es altamente especializado y requiere una planificación cuidadosa. Esto incluye la evaluación de radiografías, la medición del espacio articular y la elección del diseño más adecuado según el caso. La cirugía suele realizarse bajo anestesia regional o general, y la recuperación dependerá de factores como el estado de salud del paciente y su compromiso con la rehabilitación.

Para qué sirven las prótesis de rodilla
Las prótesis de rodilla sirven para reemplazar la articulación dañada y recuperar la movilidad perdida. Son una solución efectiva cuando los tratamientos conservadores, como fisioterapia, medicamentos o infiltraciones, ya no son suficientes para controlar el dolor y la limitación funcional.
Están indicadas en pacientes con desgaste articular severo que afecta la capacidad de caminar, subir escaleras o incluso realizar actividades básicas.
Además, ayudan a corregir deformidades de la rodilla y a prevenir el avance de la lesión en otros tejidos. En deportistas o personas activas, una prótesis bien elegida y correctamente implantada permite retomar actividades de bajo impacto, como natación, ciclismo o caminatas, siempre bajo supervisión médica.
Cuáles son los tipos de prótesis de rodillas que existen
Existen varios tipos de prótesis de rodillas, y la elección depende de la patología, la edad, la actividad física y el estado óseo del paciente. Las más comunes son:
Tipo de prótesis de rodilla | Características | Indicaciones principales |
Prótesis total de rodilla | Reemplaza toda la articulación | Artrosis avanzada, artritis reumatoide |
Prótesis parcial (unicondilar) | Sustituye solo un compartimento de la rodilla | Daño localizado en un solo lado |
Prótesis de revisión | Para reemplazar una prótesis previa desgastada o dañada | Fallo mecánico, aflojamiento, infección |
Prótesis con bisagra | Incluye un mecanismo de bisagra para estabilidad | Lesiones ligamentarias graves, cirugías complejas |
La correcta elección del tipo de prótesis de rodilla se determina mediante estudios de imagen y una evaluación clínica minuciosa. No todos los pacientes requieren una prótesis total, en algunos casos, una parcial prolonga la vida útil del implante y permite conservar más tejido sano.

Material con el que están construidas las prótesis de rodilla
El material de prótesis de rodillas es un aspecto clave para su durabilidad, resistencia y biocompatibilidad. Los implantes están fabricados con metales, plásticos de alta densidad o combinaciones de ambos. La elección del material dependerá del tipo de prótesis, la edad del paciente y su nivel de actividad física.
Aleaciones de cromo-cobalto
Las aleaciones de cromo-cobalto se utilizan ampliamente por su gran resistencia al desgaste y a la corrosión. Este material ofrece una superficie muy pulida, lo que reduce la fricción y el desgaste del polietileno con el que se contacta.
Son ideales para pacientes con alta demanda funcional, ya que soportan bien la carga y el uso prolongado. Sin embargo, en personas con alergia a los metales, es necesario evaluar alternativas.
Aleaciones de titanio
Las aleaciones de titanio son más ligeras que las de cromo-cobalto y ofrecen una excelente biocompatibilidad. Suelen emplearse en pacientes con huesos más frágiles, ya que su elasticidad es más parecida al hueso natural, lo que favorece la integración ósea.
Además, son resistentes a la corrosión y menos propensas a generar reacciones adversas, lo que las convierte en una opción segura para pacientes con sensibilidad a otros metales.
Polietilenos de UHMWPE
El polietileno de ultra alto peso molecular (UHMWPE) es un plástico de gran resistencia que se utiliza en la superficie de apoyo de la prótesis, especialmente entre el componente femoral y tibial. Su función es amortiguar la carga y facilitar el deslizamiento, imitando el cartílago natural.
Los avances tecnológicos han permitido desarrollar polietilenos de alta resistencia al desgaste, lo que prolonga la vida útil de la prótesis de rodilla.

¿Cómo se fija la prótesis al hueso?
La fijación es un aspecto fundamental para garantizar la estabilidad y la durabilidad del implante. Existen dos métodos principales: la fijación cementada y la no cementada.
Fijación cementada
La fijación cementada utiliza un cemento óseo especial para adherir la prótesis al hueso. Es el método más común, especialmente en pacientes mayores o con menor densidad ósea. Proporciona una fijación inmediata, lo que permite iniciar la rehabilitación temprano y favorece la recuperación de la prótesis de rodilla.
Fijación no cementada
En la fijación no cementada, la superficie del implante está recubierta con materiales que favorecen el crecimiento óseo dentro de la prótesis. Esto crea una unión sólida con el tiempo, sin necesidad de cemento. Es más frecuente en pacientes jóvenes o con buena calidad ósea, ya que requiere un periodo de integración más prolongado antes de alcanzar la máxima estabilidad.
Cuál es la mejor prótesis para ti
La mejor prótesis de rodilla para cada paciente dependerá de su diagnóstico, edad, peso, nivel de actividad física y expectativas a largo plazo. No existe un modelo universal, pero una evaluación personalizada garantiza la mejor elección.
Un buen resultado no solo depende del tipo y material, sino también de la técnica quirúrgica y del compromiso del paciente con la rehabilitación.

Agenda una evaluación y determina cuál prótesis es la más indicada para ti
Si estás considerando someterte a este procedimiento, lo ideal es programar una consulta especializada. En nuestra clínica evaluaremos tu estado articular, tus hábitos y tus objetivos para seleccionar la prótesis de rodilla más adecuada para ti.
Recuerda que una decisión bien informada y un plan de rehabilitación adaptado son esenciales para una recuperación exitosa y duradera.
Preguntas frecuentes
¿Cuánto dura una prótesis de rodilla?
Generalmente entre 15 y 20 años, dependiendo del tipo y material de prótesis de rodillas, así como del uso y cuidado del paciente.
¿Qué material de prótesis de rodillas es el más duradero?
Las aleaciones de cromo-cobalto combinadas con polietileno de alta calidad suelen ofrecer la mayor resistencia al desgaste.
¿La recuperación prótesis de rodilla es dolorosa?
Puede haber molestias en las primeras semanas, pero con un buen manejo del dolor y fisioterapia, el proceso es más llevadero.
¿Puedo hacer deporte con una prótesis de rodilla?
Sí, siempre que sean actividades de bajo impacto, como natación, ciclismo o senderismo suave.
¿Cuál es la diferencia entre prótesis cementada y no cementada?
La cementada se fija con cemento óseo y da estabilidad inmediata, mientras que la no cementada se integra al hueso con el tiempo.